Brizell Cedrón Apolo
Profesora de natación en donde trabaja el tema de inclusión y estudiante de educación inicial
Hoy, quiero contar una de las
experiencias más importantes que me ha tocado vivir.
Cuando me dijeron que trabajaría
con un niño asperger, pensé que sería muy complicado, pero he aprendido más de
él que él de mí. Es un niño con habilidades distintas, me sorprende su amplio léxico
y su concentración para cada actividad. Le apasiona mucho contar historias o lecciones
recién aprendidas, y logra deslumbrarme
con su inteligencia y memoria.
Ya hemos superado el año, y
Salvador, así se llama este gran niño, me ha demostrado su perseverancia y ganas
de aprender cada vez más. Siento que a pesar de sus frustraciones, por un
ejercicio mal ejecutado, con unas simples palabras de aliento vuelve en sí y da
todo.
Yo me siento muy orgullosa de
formar parte de su mundo, de haber ayudado, de alguna manera, en su rendimiento.
Siempre tuve la idea de que en los niños asperger existía un retraso motor y
sensorial, pero con Salvador he aprendido que eso no es ningún problema para
avanzar, pues él le pone todas las ganas y se traza metas.
En la actualidad ha logrado
aprender los 4 estilos de natación, su nado es limpio y presenta mucha
fortaleza en cada en 25 metros. Sabe que debe llegar al otro extremo sin parar
y debe demostrar cada día un poco más.
Pero ¿Cómo lograr estos objetivos
y metas?
Creo que en el tema educativo
los profesores no trabajan con ellos porque tienen miedo o creen que no lograrán
avanzar. Pero no son así las cosas,
trabajar con un niño con habilidades especiales o extraordinarias es un honor
para el profesor, porque ves el avance y ayudas al niño a socializar.
En el caso de Salvador, él se
lleva bien conmigo, con los demás profesores, le enseño a compartir carril en
la piscina y cada día demuestra que puede aprender a socializar.
El deportes es indispensable en
los niños porque les crea disciplina, aprenden a darse cuenta que hay un
proceso, un inicio, un punto medio y con esfuerzo alcanzarán lo que se proponen,
sobre todo la natación que es un deporte completo, que fortalece la coordinación
y les ayuda a progresar en su camino a
la inclusión.
Por ello, les digo a todas las
personas que estudian educación, que lo hagan por vocación, porque realmente
aman a los niños, aman verlos felices, aman verlos progresar y mejorar, la
empatía es muy importante, no solo brindarles conocimiento, sino también
decirles y sientan que los están ayudando.
Mostrarles que todo está bien,
que si hoy no le sale, mañana será diferente, pero no decirles lo contrario,
porque eso es frustrarlos, limitarlos. Tienes que decirles que lo sigan intentando hasta conseguirlos.
En algún momento, Salvador
lloraba, se detenía, pero yo le decía, tú puedes, todos los niños han pasado
por ese proceso y lo han logrado. Ahora hace el estilo libre sin pararse a
mitad de piscina y eso es un gran logro para él.
Sin embargo, quiero destacar
que se trata de un trabajo global; es decir
familia, colegio y Estado. A mis
colegas les invito a que si tienen un caso así, de niños con habilidades
extraordinarias y/o especiales, lo tomen, porque se van a sentir bien.
Es importante porque al
trabajar con las familias, los padres de los otros niños les explicarán a sus
hijos que todos los niños son iguales, con diferentes habilidades, pero iguales
a ellos. Por ello, considero que el tema educativo es fundamental, porque todos
nos quejamos de la violencia, pero olvidamos fortalecer la educación desde la
casa y la escuela, las autoridades deben
tener como prioridad la educación.
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